Poca gente les echará de menos, menos aún suplicarán su vuelta en un grupo de facebook. No son Oasis, ni quisieron serlo. Cuando me enteré de que Arab Strap se separaban no me pareció una sorpresa, ambos habían estado trabajando en proyectos individuales y era algo predecible. No me afectó como cuando se separaron "At the drive-in", solo me pareció una lástima.
A día de hoy, si me jode, porque cuando encuentras el valor real de las canciones y sobre todo de las letras cargadas de amor, sexo, alcohol y soledad de "Monday at the hug and pint", es cuando echas de menos una continuación, cuando te queda la sensación de que pudo haber más.
El disco es una colección de miserias, lamentos, melancolía, odio... pero a la vez deja entrever que se puede abrir la boca para respirar, que resta un segundo para pensar en que existe una salida en algún sitio.
Los arreglos son magistrales, los electrónicos abundan, pero los mejores, los que hacen que las canciones te duelan... son los de cuerda, como en el final de "Fucking little bastards" y en "Act of War".
Si no tienes tiempo de escuchar el disco entero, escoge "The Shy Retirer", "Flirt", "Who named the days?"...
Como curiosidad, en su momento tuvo un 8.7 en Pitchfork.
